En este momento estás viendo EL ARTE DE LA ESCUCHATORÍA ESCUCHATORIA

EL ARTE DE LA ESCUCHATORÍA ESCUCHATORIA

Saber oír y apreciar al orador

Existen grandes diferencias entre oír y escuchar, oír es simplemente percibir vibraciones de sonido es pasivo, por otra parte escuchar es la capacidad de recibir, atender, interpretar y responder a los mensajes verbales y otras expresiones, tales como el lenguaje corporal esto quiere decir entender, comprender y dar sentido a lo que se oye.

Escuchar pertenece al mundo interpretativo del lenguaje, implica la comprensión e interpretación personal, la capacidad de escucha se extiende a la estructura interna de una persona aun cuando no hay sonidos, ya que escuchar es un proceso psicológico y activo, así que todos podemos dejar de escuchar cuando queramos.

La escucha en realidad es, la suma de tres cosas: arte, ciencia y cualidad social. 

Los diferentes tipos de escucha

  • Apreciativa: escucha de manera relajada y busca placer, entendimiento o inspiración.
  • Selectiva: escucha seleccionando la información que le interesa al receptor.
  • Discernimiento: escucha la información completa, entiende el mensaje en general y determina los detalles importantes.
  • Reflexiva: escucha reflexionando sobre el mensaje o parte de él.
  • Analítica: escucha el orden y el sentido de la información para entender la relación entre las ideas, medita sobre lo que se ha dicho y examina si las conclusiones son lógicas y objetivamente correctas, por otra parte el receptor separa la información de las emociones del emisor.
  • Sintética: el receptor toma la iniciativa de la comunicación hacia sus objetivos, se realiza afirmaciones para que el interlocutor conteste con sus ideas.
  • Empática: escucha sin prejuicios, da apoyo a quien habla y aprende de la experiencia de su interlocutor, hay calidez en la escucha y evita interrumpir y dar consejos.
  • Activa: escucha captando la totalidad del mensaje, interpreta el significado y envía señales de confirmación que se escucha.

Proceso de E.A. Enseñanza-Aprendizaje.

1. Ser consciente del otro: concentrarse en el mensaje de la otra persona, evitando todo tipo de distracción mental (prejuicios) o ambiental (ruidos) haciendo el esfuerzo personal de prestar atención (empatía) y demostrando al emisor que percibimos el mensaje.

2. Posición y mirada: mantener una posición adelantada, avanzando todo el cuerpo desde la cintura. Mantener nuestra mirada fija sobre los ojos de nuestro interlocutor.

3. Observar el lenguaje no verbal: observar los gestos nos ayudará a entender mejor la intención y el sentimiento de lo comunicado.

4. Detectar las palabras clave: los mensajes son adornados muchas veces de cientos de palabras, pero las ideas claves son las que dan el contenido exacto de la misiva. Las palabras clave nos transmiten de verdad la información y los intereses del emisor.

5. Interrogarse constantemente el significado de las palabras claves que nos están diciendo preguntarnos de forma reflexiva. ¿Es esto lo que quiere decirme? ¿Qué hay detrás de sus palabras? ¿Qué quiere indicar?

6. Retroalimentar resumiendo: parafrasear de vez en cuando, precisando al emisor una parte del mensaje así como buscar el momento oportuno pero nunca interrumpir.

Utilizar frases del tipo: 

  • La impresión de lo me dices es…
  • Si entiendo bien, quieres decirme…
  • Los puntos resumidos de lo que has dicho son…
  • Aclárame este punto…

La Empatía es la capacidad de ponerse en el lugar del otro, es comprender lo que siente en cada momento y a su vez entrar en el mundo del otro y ver las cosas desde su punto de vista. Sin embargo, no significa opinar lo mismo que el otro, ni sentir lo que él siente, se trata de aceptar y respetar sus ideas y emociones, comprensión e interés por los problemas del otro y  ganas de ayudar a los demás.